lunes, 28 de octubre de 2013

Los ingenieros de Caminos fieles a la República

Estimulado por un comentario de Miguel Angel del Val he hecho una pequeña investigación sobre este asunto, del que probablemente me ocuparé mas a fondo, cuando disponga de tiempo suficiente, tras mi jubilación.

Sobre este asunto se han escrito dos libros muy interesantes : el libro De Madrid al Ebro de Julian Diamante Cabrera y el de Angel Mario Carreño "De la zanja del olvido al olvido de la zanja". Estos libros contemplan la cuestión desde una perspectiva diferente: el primero de ellos es un relato autobiográfico de un ingeniero leal a la República, y el segundo es un análisis de la actuación de los ingenieros de caminos en la década 1930 -1939, escrito con pretensiones de neutralidad.

Con los libros anteriores y la consulta a los boletines oficiales correspondientes, y alguna otra información dispersa por la red se pueden sacar algunas conclusiones rápidas, sin perjuicio de un trabajo más detenido sobre los expedientes judiciales y administrativos de los interesados.

El número de ingenieros de caminos sancionados por su adhesión a la República tras el 18 de julio de 1936 es de 92 sobre 1.186 miembros del escalafón de 1936, es decir un  7,8%.

De ellos 70 fueron expulsados del Cuerpo y 22 sancionados con traslados forzosos, postergación o incapacidad para ocupar cargos directivos, de acuerdo con la Ley de 10 de Febrero de 1939.

A cinco de los expulsados del Cuerpo se les aplicó , con mayor o menor pretendida cobertura jurídica, el bando de guerra y fueron fusilados en el comienzo de la contienda ( Carlos Díaz Pache, Juan Lozano Ruiz, Teodoro Morollón Belmonte,  Adolfo Pastor Santamaría, y Juan José Santa Cruz). José Orad de la Torre murió el 20 de julio de 1936 en lo que puede considerarse una acción de guerra. José Salmerón murió durante la contienda de muerte natural.

Por lo que se refiere al perfil político- ideológico de los sancionados cabe considerar los siguientes grupos

  • Ingenieros de cierta edad y posiciones altas en el escalafón, generalmente de ideología republicana y ,con toda probabilidad, muchos de ellos miembros de la masonería.
  • Ingenieros jóvenes de ideología izquierdista, socialista y comunista que hicieron la guerra en el ejército de la Républica alcanzando en general grados entre  comandante (mayor) y teniente coronel de Ingenieros o Artillería.
  • Aquellos ingenieros que prestaron servicio al Gobierno de Euzkadi o a la Generalitat de Cataluña y fueron sancionados por esa causa.
Tras la guerra, algunos ingenieros partieron al exilio, varios de ellos muy significados políticamente, como Antonio Velao o Moisés Barrio Duque. En general se exiliaron a países de Sudamérica donde continuaron desarrollando su carrera técnica de forma brillante.

Los que permanecieron en España fueron, en algunos casos juzgados por tribunales militares y condenados a penas de cárcel, que cumplieron beneficiándose de posteriores indultos, salvo en el caso de Julio Diamante Menéndez que condenado a 20 años, murió en la cárcel

Algunos de los expulsados del Cuerpo , vieron facilitada su vida profesional por sus compañeros de Cuerpo, sobre todo por aquellos que dirigían empresas constructoras, que no vacilaron en contratar a sus compañeros sancionados.

El trabajo que resta consiste en analizar los expedientes judiciales o administrativos de cada uno de ellos. Ya adelanto que hay biografías verdaderamente apasionantes y posiciones políticas poco esperables en un colectivo, que por su procedencia social e incluso por sus funciones, tenía una actitud política francamente conservadora y que por ello sufrió una dura represión en el territorio dominado por la República en los primeros momentos de la contienda  Aquellos que la sufrieron tuvieron amplio reconocimiento por parte de los ganadores de la guerra

1 comentario:

  1. Chema Díaz Retana, jmdiazretana@gmail.com19 de agosto de 2023, 14:10

    Estimado, estoy interesado en comentar este tema contigo, ya que en 2022 hice un trabajo parecido sin conocer el tuyo.

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